Epilepsia: Causas, síntomas y tratamientos

¿Qué es la epilepsia?

La epilepsia es un trastorno neurológico que se caracteriza por la actividad eléctrica anormal del cerebro. Esta actividad eléctrica puede generar convulsiones o crisis epilépticas que pueden variar en intensidad y duración de persona a persona. La epilepsia puede afectar a personas de todas las edades en todo el mundo y representa un costo mundial de 20 billones de euros al año.

Definición de la epilepsia

La epilepsia es una enfermedad crónica que se caracteriza por la presencia de convulsiones o crisis epilépticas recurrentes. Para considerar que una persona padece epilepsia debe haber tenido al menos dos convulsiones no provocadas por una causa externa como pudieran ser un traumatismo craneal o una fiebre alta. O una sóla crisis, si se detecta una lesión cerebral persistente y causante de la misma. 

Causas de la epilepsia

Existen distintos factores que pueden ser causantes de la epilepsia, algunos de ellos son:

• Anomalías cerebrales congénitas.
• Lesiones cerebrales debido a traumatismos o enfermedades cerebrales como un tumor cerebral.
• Enfermedades infecciosas como la meningitis o la encefalitis.
• Trastornos del desarrollo cerebral que se presentan desde el nacimiento como el síndrome de Down.
• Defectos genéticos que se transmiten de padres a hijos.
• Abuso de sustancias como el alcohol y las drogas.

¿Cómo se diagnostica la epilepsia?

Para diagnosticar la epilepsia, el médico realiza una serie de pruebas que incluyen:

• Historial clínico del paciente y exploración física.
• Electroencefalograma (EEG) para medir la actividad eléctrica del cerebro.
• Análisis de sangre para detectar trastornos metabólicos o infecciones.
• Tomografía computarizada (TC) o resonancia magnética (RM) para detectar anomalías cerebrales.

Tipos de epilepsia

Existen varios tipos de epilepsia, entre ellos se encuentran:

Epilepsia generalizada

La epilepsia generalizada se caracteriza por la afectación de ambos hemisferios cerebrales y puede presentar distintos tipos de crisis epilepticas como las tónico-clónicas generalizadas.

Epilepsia focal

La epilepsia focal se caracteriza por la actividad anormal de una zona específica del cerebro y puede presentar varios tipos de crisis epilepticas como las crisis parciales simples y las crisis parciales complejas.

Epilepsia idiopática o genética

La epilepsia idiopática o genética es aquella en la que se desconoce la causa exacta pero se sabe que está condicionada genéticamente.

Epilepsia criptogénica o sintomática

La epilepsia criptogénica o sintomática se produce cuando la epilepsia está relacionada con una causa subyacente como alguna lesión cerebral o trastorno del desarrollo.

Epilepsia refleja

La epilepsia refleja se produce como respuesta a ciertos estímulos como la luz intermitente de los juegos electrónicos o los cambios bruscos de temperatura.

Síntomas de la epilepsia

La epilepsia se manifiesta de diferentes maneras en cada persona, aunque hay algunos síntomas comunes que es importante conocer. Los síntomas varían según el tipo de epilepsia que tenga la persona y la parte del cerebro que esté afectada.

Síntomas de la epilepsia generalizada

La epilepsia generalizada se caracteriza por afectar a todo el cerebro. Los síntomas más comunes son:

• Crisis tónicas-clónicas, también conocidas como convulsiones
• Pérdida de conciencia y caída al suelo
• Temblores en todo el cuerpo
• Contracciones musculares
• Babeo o mordedura de la lengua
• Pérdida de control de los esfínteres

Síntomas de la epilepsia focal

La epilepsia focal, también conocida como epilepsia parcial, afecta a una parte del cerebro. Los síntomas variarán dependiendo de la zona del cerebro afectada pero pueden incluir:

• Movimientos desordenados en una parte del cuerpo
• Dificultad para hablar o comprender el lenguaje
• Sensaciones extrañas como hormigueo o calor en una parte del cuerpo
• Alteraciones en la percepción visual, auditiva u olfativa
• Mareos o desorientación

Tipos de crisis epilépticas

Existen varios tipos de crisis epilépticas que se pueden presentar, cada uno con sus propias características y síntomas. A continuación, se describen algunos de los tipos más comunes de crisis epilépticas:

Crisis tónico-clónicas generalizadas

Esta es la forma más común de convulsión epiléptica y suele ser la que más se asocia con la epilepsia. Se caracteriza por la pérdida de conciencia y la rigidez del cuerpo (fase tónica) seguida de movimientos involuntarios e incontrolables (fase clónica). Estas convulsiones pueden durar varios minutos y pueden requerir tratamiento médico inmediato.

Crisis parciales simples

En estas crisis epilépticas, el paciente mantiene la conciencia, pero experimenta alteraciones sensoriales o motoras. Por ejemplo, puede tener una sensación extraña en un miembro o tener movimientos involuntarios de un lado del cuerpo.

Crisis parciales complejas

En estas crisis epilépticas, el paciente experimenta una pérdida de conciencia temporal y puede presentar comportamientos automáticos (como movimientos repetitivos o masticación excesiva). Estas crisis suelen durar varios minutos.

Convulsiones focales

Las convulsiones focales se producen cuando la actividad eléctrica anormal se origina en una zona específica del cerebro. Pueden afectar a una sola parte del cuerpo o a una función específica, como el habla o la visión.

Convulsiones generalizadas

Las convulsiones generalizadas se originan en ambos hemisferios cerebrales a la vez. Pueden presentarse en forma de un espasmo repentino (mioclonía) o una pérdida temporal de conciencia (ausencias).

Aura epiléptica

Un aura epiléptica es una sensación extraña que una persona puede sentir antes de tener una convulsión. También puede ser una señal de advertencia para una crisis parcial. Las auras son diferentes para cada persona y pueden incluir sensaciones desagradables como un fuerte olor, una sensación de déjà vu o una sensación de miedo sin motivo aparente.

Epilepsia y trastornos psicológicos

Las personas con epilepsia tienen un mayor riesgo de sufrir trastornos psicológicos como depresión, ansiedad y dificultades para dormir. Estos trastornos pueden estar relacionados con la carga emocional de vivir con una enfermedad crónica y con los efectos secundarios de los medicamentos.

Epilepsia y trastornos neurológicos

Las personas con epilepsia también pueden desarrollar otros trastornos neurológicos como la migraña, el síndrome de Tourette y el síndrome de Rett. Es importante llevar un control regular para detectar cualquier posible síntoma y tratarlo adecuadamente.

Epilepsia y problemas de salud física

Las personas con epilepsia pueden experimentar otros problemas de salud física relacionados con la enfermedad o su tratamiento. Estos pueden incluir lesiones durante una crisis, problemas hormonales, aumento de peso debido a los medicamentos y osteoporosis debido a la disminución de la actividad física a los propios fármacos. Es importante tomar en cuenta estos síntomas e informar a un especialista para un diagnóstico adecuado y recibir un tratamiento que mejore la calidad de vida.

¿Cómo se trata la epilepsia?

La epilepsia es una enfermedad que se puede tratar con diferentes métodos, dependiendo del tipo de epilepsia que presente el paciente y de la gravedad de los síntomas que experimente. En este apartado, vamos a hablar de los métodos más comunes que se utilizan para tratar la epilepsia.

Medicamentos antiepilépticos

Los medicamentos antiepilépticos son el tratamiento más común para la epilepsia. Estos fármacos ayudan a controlar las convulsiones y la actividad eléctrica anormal del cerebro. Es importante tener en cuenta que cada paciente requiere un tipo de medicamento específico, por lo que es necesario que un especialista en neurología prescriba el tratamiento adecuado para cada caso.

Tipos de medicamentos antiepilépticos

Existen varios tipos de medicamentos antiepilépticos, que se dividen en función de su mecanismo de acción. Algunos de los clásicos son: – Ácido valproico – Carbamazepina – Fenitoína – Lamotrigina – Levetiracetam – Topiramato – Oxcarbazepina. Aunque eficaces, tienen significativos efectos adversos y han aparecido en los últimos años alternativas muy eficaces y mejor toleradas. 

Efectos secundarios de los medicamentos antiepilépticos

Los medicamentos antiepilépticos pueden tener efectos secundarios, como: – Somnolencia – Mareos – Náuseas – Irritabilidad – Cambios de humor Es importante que el paciente informe a su médico si experimenta algún efecto secundario durante el tratamiento.

Cirugía de la epilepsia

En algunos casos, la cirugía puede ser necesaria para tratar la epilepsia. Este procedimiento consiste en extirpar una pequeña parte del cerebro que está causando las convulsiones. La cirugía se realiza únicamente en pacientes en los que no se puede controlar la epilepsia con medicamentos y siempre se realiza después de un exhaustivo estudio del paciente.

Tipos de cirugía de la epilepsia

Existen diferentes tipos de cirugía de la epilepsia, entre los cuales se encuentran: – Lobectomía temporal: en la que se extirpa una parte del lóbulo temporal del cerebro. – Hemisferectomía: en la que se extirpa una parte completa de uno de los hemisferios cerebrales. – Resección del área epileptogénica: en la que se extirpa una parte pequeña del cerebro donde se origina la epilepsia.

Estimulación del nervio vago

La estimulación del nervio vago es un tratamiento que consiste en implantar un dispositivo en el cuello que estimula el nervio vago. Esto ayuda a reducir la frecuencia y la intensidad de las convulsiones en algunas personas con epilepsia.

Dieta cetogénica

La dieta cetogénica es un tratamiento que consiste en seguir una dieta alta en grasas y baja en carbohidratos. Este tipo de dieta puede reducir la frecuencia y la intensidad de las convulsiones en algunos pacientes con epilepsia.

Prevención de la epilepsia

No es posible prevenir todos los casos de epilepsia, pero hay algunas medidas que se pueden tomar para reducir el riesgo de desarrollar esta enfermedad, como: – Evitar traumatismos craneales – Controlar la presión arterial – Dormir lo suficiente y evitar el estrés – Mantener una dieta saludable y hacer ejercicio regularmente Es importante seguir las recomendaciones de los especialistas en neurología para prevenir la epilepsia o controlarla en caso de que se presente.

Riesgo de muerte en la epilepsia

Si bien la epilepsia en sí misma no suele ser mortal, las convulsiones pueden poner en riesgo la vida del paciente. En casos muy raros, las convulsiones pueden provocar la muerte súbita inesperada en la epilepsia (SUDEP, por sus siglas en inglés). Para reducir el riesgo de SUDEP y otras complicaciones, es importante seguir las recomendaciones médicas y tomar las medidas adecuadas para controlar las convulsiones.

Medidas de seguridad para prevenir lesiones

Durante una convulsión, es posible que el paciente pierda el control del cuerpo y caiga al suelo. Para prevenir lesiones, es importante tomar medidas de seguridad, especialmente si la persona está en un lugar con objetos peligrosos o bordes afilados. Algunas medidas de seguridad que se pueden tomar incluyen:

• Mantener una distancia segura de objetos peligrosos
• Colocar un cojín o almohada debajo de la cabeza del paciente para evitar golpes
• Asegurar que la ropa del paciente no está demasiado apretada ni tiene objetos que puedan causarle lesiones
• Evitar sujetar o inmovilizar al paciente durante la convulsión

Qué hacer durante y después de una convulsión

Durante la convulsión, es importante mantener la calma y asegurarse de que el paciente está seguro y no corre riesgo de sufrir lesiones. Es importante no intentar introducir nada en la boca del paciente durante la convulsión. Después de la convulsión, es importante:

• Colocar al paciente en posición de recuperación lateral (boca abajo para evitar que se atragante en caso de vómitos)
• Vigilar la respiración y la conciencia del paciente
• Tomar nota de la hora y la duración de la convulsión
• Revisar al paciente en busca de lesiones o signos de trauma

¿Cómo afecta la epilepsia a la vida cotidiana?

La epilepsia es un trastorno que afecta no solo a la salud física de las personas que lo padecen, sino también a su calidad de vida. Esta enfermedad puede generar ciertas limitaciones y afectar hábitos y actividades diarias. A continuación, se detallan algunos de los aspectos más relevantes a tener en cuenta.

Epilepsia y trabajo

Para las personas con epilepsia, encontrar y mantener un trabajo puede ser un reto. Aunque esta enfermedad no debería impedir el acceso al empleo, las convulsiones o una mala gestión de la medicación pueden generar problemas en el desempeño laboral. Es importante que las personas con epilepsia comuniquen su estado de salud a su empleador y colegas, para que puedan tomar medidas en caso de una crisis. En muchos casos, las personas con epilepsia pueden llevar una vida laboral normal. 

Sin embargo, existen profesiones o trabajos que pueden resultar peligrosos si se sufren convulsiones, como pilotar aviones o conducir vehículos que requieren atención constante. En estos casos, es recomendable consultar con un especialista para evaluar si se está capacitado para este tipo de tareas.

Epilepsia y vida sexual

La epilepsia no debería ser un impedimento en la vida sexual de las personas. Sin embargo, puede haber ciertas limitaciones o situaciones a tener en cuenta. En algunos casos, los medicamentos antiepilépticos pueden afectar la libido, la erección o la capacidad de llegar al orgasmo. 

Es importante hablar con el neurólogo o especialista sobre estos problemas, para poder adaptar el tratamiento o buscar alternativas. Las convulsiones durante el acto sexual son poco frecuentes, pero pueden ocurrir. Es importante que tanto la persona con epilepsia como su pareja conozcan los síntomas de una crisis y sepan cómo actuar en caso de que ocurra. Además, se recomienda prever medidas de protección durante las relaciones sexuales, para evitar lesiones en caso de una convulsión.

Epilepsia y embarazo

La epilepsia no impide el embarazo ni viceversa, pero puede haber ciertos riesgos que conviene conocer. Algunos medicamentos antiepilépticos pueden afectar al feto o aumentar el riesgo de malformaciones o complicaciones durante el embarazo. 

Por este motivo, es importante que las mujeres con epilepsia consulten con su neurólogo antes de quedarse embarazadas, para adaptar el tratamiento si es necesario. Durante el embarazo, las mujeres con epilepsia deben recibir una atención especializada para prevenir crisis que puedan afectar al feto y la madre. Además, el parto debe ser programado y controlado por un especialista, para evitar complicaciones.

Epilepsia y deporte

Las personas con epilepsia pueden practicar deportes y ejercicios físicos de forma segura. Sin embargo, existen ciertos riesgos y limitaciones a tener en cuenta. Las crisis pueden ocurrir durante la actividad física, por lo que se recomienda tomar precauciones y consultar con un especialista para evitar situaciones de riesgo. 

En algunos casos, es recomendable evitar deportes o actividades que puedan representar un riesgo para la persona o para terceros, como natación solitaria o deportes de riesgo extremo. En cualquier caso, es importante consultar con un especialista antes de empezar cualquier tipo de actividad física, para evaluar el riesgo y prevenir situaciones peligrosas.

La atención médica en la epilepsia

La epilepsia puede requerir atención médica especializada, por lo que es importante saber qué papel desempeñan los médicos en el tratamiento y seguimiento de esta enfermedad. En este sentido, dos especialistas son fundamentales: el médico de atención primaria y el neurólogo.

El papel del médico de atención primaria

El médico de atención primaria es el primer profesional de la salud al que acuden muchas personas con síntomas de epilepsia. Su papel es fundamental en la valoración del paciente y en la derivación a otros especialistas en caso de ser necesario.

En muchas ocasiones, el médico de atención primaria será el encargado de realizar una primera evaluación de los síntomas del paciente y de solicitar las pruebas diagnósticas necesarias para establecer un diagnóstico de epilepsia. Si el diagnóstico es positivo, puede ser el responsable de comenzar el tratamiento con antiepilépticos y de realizar un seguimiento inicial del paciente.

En cualquier caso, el médico de atención primaria trabajará en estrecha colaboración con otros especialistas, como el neurólogo, para asegurar un diagnóstico preciso y un adecuado tratamiento.

El papel del neurólogo

El neurólogo es el especialista que se encarga del diagnóstico y tratamiento de la epilepsia. Su experiencia en el manejo de esta enfermedad y su formación en el campo de la neurología lo convierten en el profesional ideal para tratar a los pacientes con epilepsia.

El papel del neurólogo en el tratamiento de la epilepsia es clave. En primer lugar, será el encargado de confirmar el diagnóstico y realizar pruebas complementarias para descubrir la causa de la epilepsia, determinar el tipo de crisis y establecer un tratamiento adecuado.

El neurólogo también es el encargado de decidir qué medicamentos antiepilépticos se deben utilizar en cada caso. Para ello, se basará en la experiencia clínica y en las recomendaciones internacionales.

En resumen, el neurólogo es el especialista que más conocimientos tiene sobre el diagnóstico y tratamiento de la epilepsia y su papel es clave para un adecuado manejo de esta enfermedad.

Epilepsia y atención médica en otros países

La atención médica en la epilepsia varía según el país y las disponibilidades sanitarias y económicas del mismo. En algunos países en desarrollo, puede ser difícil acceder a un neurólogo o a tratamiento especializado para la epilepsia.

Por esta razón, organizaciones internacionales como la OMS y la ILAE trabajan para mejorar la atención médica de la epilepsia en todo el mundo, promoviendo la creación de centros de diagnóstico y tratamiento y la formación de profesionales de la salud en el abordaje y tratamiento de esta enfermedad.

En cualquier caso, es importante destacar que la epilepsia es una enfermedad que puede ser tratada con éxito y por eso es fundamental acudir a los especialistas en el manejo de esta patología para garantizar la mejor calidad de vida posible a los pacientes con epilepsia.

Preguntas frecuentes acerca de la epilepsia

La epilepsia puede ser una afección complicada y difícil de entender, y es común tener preguntas sobre la enfermedad y sus síntomas. Aquí te ofrecemos algunas de las preguntas más frecuentes acerca de la epilepsia y sus respuestas:

¿La epilepsia tiene cura?

No hay una cura conocida para la epilepsia, pero el tratamiento adecuado puede ayudar a controlar los síntomas de esta enfermedad y mejorar la calidad de vida de las personas que la padecen.

¿Las convulsiones siempre son epilepsia?

No todas las convulsiones son epilepsia. Las convulsiones pueden ser un síntoma de otras afecciones, como infecciones cerebrales, accidentes cerebrovasculares o tumores cerebrales, así que es importante que un médico haga un diagnóstico adecuado.

¿Cuáles son las causas más comunes de la epilepsia?

Las causas de la epilepsia pueden ser variadas, y pueden incluir daño cerebral por lesión o enfermedad, trastornos cerebrales congénitos, trastornos genéticos, accidentes cerebrovasculares y tumores cerebrales.

¿La epilepsia es una enfermedad mental?

La epilepsia es una condición neurológica, no una enfermedad mental. Sin embargo, la epilepsia puede estar asociada con ciertos trastornos psiquiátricos, como la depresión y la ansiedad, y puede afectar la salud mental de la persona.

¿Cómo puedo ayudar a alguien durante una convulsión?

Lo mejor que puedes hacer es proteger a la persona de cualquier lesión durante la convulsión. Mantén a las personas a su alrededor alejadas, y coloca suavemente algo blando debajo de su cabeza. No intentes poner nada en la boca de la persona, ni trates de contener sus movimientos.

¿Puede la epilepsia afectar el desarrollo cognitivo?

En algunos casos, la epilepsia puede afectar el desarrollo cognitivo, especialmente si la enfermedad comienza en la niñez. Sin embargo, muchas personas con epilepsia no experimentan ningún problema cognitivo o de desarrollo.

¿Es posible tener epilepsia sin convulsiones?

Sí, es posible tener epilepsia sin convulsiones. Algunas formas de epilepsia pueden causar otros síntomas, como mareo, desmayos, o ausencias, además de convulsiones.